Por Jesús Antonio Rodríguez Morilla
Como es sabido, la Ley de Amnistía fue el producto de un acuerdo entre PSOE, JUNTS y ERC, con objeto de sacar adelante la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno tras las elecciones generales del pasado 23 de julio.
Inicialmente, fue ERC el partido que llegó a un pacto con los socialistas, cuyas líneas maestras era la promesa de una ley de amnistía y el traspaso integral del servicio “Rodalies” al Gobierno catalán.
Más tarde se sumó JUNTS, que, aparentemente consiguió otras concesiones, como la posibilidad de que la entidad liderada por Puigdemont propusiera un referéndum de autodeterminación a lo largo de la legislatura y la negociación de impuestos .
- Recientemente, venimos asistiendo a distintas grotescas actuaciones y léxicos de los protagonistas, los cuales parecen señalar un permanente escaparate negociador del Gobierno y sus peculiares concesiones, mediante “globos sonda” o “filtraciones”.
La metáfora “Pozo sin fondo” sugiere que la amnistía podría traer consigo una serie de problemas o desafíos continuos, tal vez sin un final claro o con un costo mayor del anticipado.
Lo anterior podría estimarse, resolviéndolos a favor de parte, o bien, ofreciendo nuevos comienzos, generando más complicaciones o siendo explotada, la Amnistía a perpetua impunidad debilitando el sistema judicial y la confianza en las instituciones ¿Quién asegura por tanto una veracidad igualitaria en las negociaciones?
Leíamos en el Diccionario del Diablo, (Ambrose Bierce, periodista satírico estadounidense), las definiciones siguientes, las cuales podrían aproximarse a la actual situación:
- Amnistía, s. Magnanimidad del Estado para con aquellos delincuentes a los que costaría demasiado castigar.
- Ejecutivo, s. Rama del gobierno que hace cumplir los deseos del legislativo hasta que el poder judicial los declara nulos y sin efecto.
En dicha Rama, podrían encontrarse, algunos puestos claves, sumamente conocidos por todos, y que guardan celosamente al jefe de Gobierno y su política.
Sin ánimos peyorativos, y con las reservas habituales sobre la Mitología Griega, acude a la memoria el mito de Hades, uno de los doce dioses del Olimpo, dios del inframundo en la antigua Grecia junto al Can Cerbero, uno de sus fieles y fiero perro con tres cabezas y cola con serpientes.
Resumiendo, una interpretación aproximada de lo que viene sucediendo, dependerá del contexto específico en el que se use, ya que la Amnistía, aparte de la retórica puede tener diferentes implicaciones según el país, la situación histórica y sobre todo los actores involucrados, especialmente los Tribunales llamados a intervenir.
Ya en febrero 2023, escribíamos: España, Rehén de Incertidumbres, Caos y Ambiguo Futuro. Apenas existía en aquel entonces margen de error, para imaginar que una negociación ilimitada con Cataluña, “bajo un paraguas” como la Amnistía, acarrearía posibles perjuicios para otras C.C.A.A.
Adelantaba la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA), en su último informe: Estimación del gasto futuro en intereses de la deuda pública de las CCAA’ (2023-2026), que la deuda de Cataluña crecería 1.479 millones de euros, hasta los 85.806 millones de euros en 2026, como consecuencia, de tener en cuenta el entorno de endurecimiento de la política monetaria, sería Cataluña la región que más intereses abonase..
Otro dato para tener en cuenta, según Diario Ara, es que la “deuda histórica del Estado español” con Cataluña asciende a 456.000 M€: según el “Parlament”, (10 nov 2023).
¿Se imaginan Uds. caso de independencia, una reclamación a España de tal índole, junto a las perspectivas filtradas?
Algo más adelante, el pasado marzo, otro Texto titulado: ¿Cuál será la próxima necedad jurídico/política?, ya que no resulta excesivamente difícil intuir lo que siempre favorece cuasi permanentemente a una de las partes en conflicto.
Puede visualizar el artículo publicado en el siguiente enlace:
https://www.canariasdiario.com/noticia/133868/opinion/amnistia:-negociacion-politica-sin-fondo.html