OPINION Martes 2 de Julio de 2019
Jesús Antonio Rodríguez Morilla
Abogado
En ocasiones, el Columnista, cuando escribe sobre estos temas, tiene la sensación de parecerse a SÍSIFO, personaje de la Mitología, a quién los Dioses del Olimpo, ¡vaya Vd. a saber por qué!, condenaron durante la eternidad, a subir y bajar por una pronunciada montaña, una enorme piedra de considerable peso y dimensiones, una y otra vez…
Similares sensaciones inentendibles, siente el Autor, cuando como testigo asiste a las diversas tropelías cometidas contra el Medio Ambiente.
Hace unos días, sin ir más lejos, un Medio de Telde, daba cuenta a la luz pública, de otro episodio sobre el estado de inmundicias en que se encuentran los solares y terraplenes que rodean al Colegio Príncipe de Asturias de Melenara.
Inconcebible, lo manifestado por los vecinos respecto a que excede de un año el tiempo que llevan abandonados los residuos en la Zona, y, para más “inri”, ubicada junto a un Colegio, sobre el que deberían exigirse extremar los cuidados.
Canariasdiario.com mantiene una línea editorial de ferviente y decidido apoyo por mejorar esta tierra en la cual vivimos.
Por ello, nuestro pequeño grano de arena, se encontrará siempre disponible, dirigido al objeto que gira alrededor del punto anterior.
También, tenga la población vecinal, la seguridad de una buena solución, la encontrarán en los Medios de Comunicación, trasladándoles a través de sus justificadas quejas, las cuales obliguen a los responsables medio ambientales, ir otorgando soluciones sobre los problemas que casi a diario sufren los ciudadanos.
Créanme, su fuerza es inagotable, a través de las denuncias dirigidas hacia los servicios responsables, señalando sus inacciones, habiendo tenido este humilde Autor, ocasión de comprobarlo en distintas ocasiones.
Estos tipos de Vertederos u Escombreras, vienen a ser como la mala hierba, aparecen y crecen en los lugares más insospechados contribuyendo a denigrar todo tipo de paisaje y, sobre todo, salubridad en el caso que nos ocupa, qué si no se presta solución, podría bordear otra denuncia ante las autoridades europeas.
El Autor, viene siguiendo con suma atención el hecho llamativo de que, una vez más, España se ha visto condenada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, en varias ocasiones, convirtiéndonos en el Estado más sancionado de la Unión Europea, y que sí no se controla, vamos caminos de convertirnos en lo “peorcito” de Occidente.
Igualmente, seguimos con regularidad las evoluciones de nuestro ya clásico problema, y estancamiento en las Direcciones Generales o Consistorios pertinentes, lugar, donde los “muros del silencio” de Bruselas, son altos y escarpados, lugares, donde ciudadano o colectivo, sucumbirán burocráticamente hablando.
Las mismas, suelen tener “tres paternidades responsables”: Estatal; Autonómico y Local, que suelen tirarse piedras los unos a los otros y los contribuyentes en medio.
Prácticamente, no existe una “receta magistral” contra las “inacciones” de tipo político, que nos tocan soportar, y para eliminar este tipo de vertederos, se debería recurrir a la cultura urbana y a la solidaridad vecinal y sus denuncias, tal y como el caso contemplado.
Cámaras de Vigilancia (si existen lugares para su instalación) “drones”, y, sobre todo, más atención por parte de las autoridades, aunque repito, problema de difícil solución.
La creación de vertederos específicos en terrenos municipales y su posterior sellado, podría aceptarse de forma provisional, pero tampoco es la solución en el tiempo.
Las Plantas de Valoración, son las soluciones más idóneas, pero tienen otro gran enemigo que se une: también: la falta de suelo.