La Sentencia del Tribunal de Justicia de fecha 15/03/2017, puso colofón a los Vertederos de Burgos: MIRANDA DE EBRO Y POZA DE LA SAL través de su Sala Décima, declarando el incumplimiento de las autoridades españolas respecto a nuestras obligaciones asumidas como Estado Miembro.
Más de lo mismo, con fecha 8.6.18, la Comisión reitera que las autoridades españolas tenían que haber previsto retrasos en las obligaciones que les incumben, garantizando que la gestión de los residuos, se realiza sin poner en peligro la salud y perjudicar al medio ambiente.
Si tenemos en cuenta los prolegómenos de este “affaire”, nos encontraremos que con fecha 07.03.2011, la entonces Consejera de Fomento, anuncia a través de E.P. el inicio de obras de nuestro afamado vertedero para el citado año.
Efectivamente, los trámites de publicación del Concurso todo se inicia con el EXP. A 2016000023.02.IR-13 2007, pero con un ligero retraso de 3’5 años, con una inversión de 3.456.000 euros financiado por la Junta de C y L, Consejería de Fomento y Medio Ambiente) al 50%, junto a parte idéntica procedente de los Fondos Feder (2014-2020).
A la oferta se presentaron aproximadamente unos 60 licitadores, siendo posteriormente seleccionados unos 35 ofertantes, resultando adjudicataria una UTE cuyas sedes figuran en Zamora y Madrid.
Normalmente en épocas de “hambruna en la construcción”, suele aparecer una vieja irregularidad “saducea” que utilizan muchos contratistas consistentes en ofrecer a la Administración bajas temerarias estratosféricas, en este caso un -42,90%, o lo qué es lo mismo, ofertan ejecutar el trabajo por 1.973.242,18 euros en lugar de los 3.456.000 aludidos, con resultados finales probablemente inciertos.
Lo anterior puede comprobarse en el documento de contratación electrónica emitido por la Junta de Castilla y León.
Resulta obvio objetivar que habitualmente la Administración aquilata precios al máximo como para que el Poder Adjudicador no ignore y utilice los instrumentos que la otorga la Ley de Contratos, para salir a su paso, cuando se encuentren en situaciones de estas características, qué, junto a otras surgidas en parecidas circunstancias, merecieron mayor atención ante una situación aparentemente poco ortodoxa.
El Contrato según el Boletín Oficial C y L se formaliza el 10.03.2016, con un plazo de ejecución de 9 meses, según consta en dicho Expediente, por lo que habría debido quedar finalizado el 10 de diciembre del mismo año, salvo posibles aplazamientos y variación de precios.
Es decir, la Sentencia, transcurrido un tiempo prudencial desde la supuesta finalización de los Vertederos de Poza de la Sal y Miranda de Ebro cuestiona la misma ante la denuncia interpuesta por la Comisión ante supuestas irregularidades y controversias surgidas hasta la fecha.
A la vista de los acontecimientos quedaría por saber sí dichos Vertederos han sido definitivamente finalizados y, sobre todo, su coste final a la vista de posibles deficiencias en proyecto y ejecución.
Otra cosa será lo de afrontar las sanciones llegado el momento, debiendo atenerse España a la Resolución final de carácter económico que dicte el T.J.U.E., una vez, la Comisión se pronuncie de nuevo, volviendo a poner si es el caso, en marcha “el taxímetro de sanciones”.
El tema medio ambiental suele ser de carácter riguroso en la Comisión, excepto en la época actual en la cual han tenido qué suavizar posturas, y eso, que a nuestro País y su tripartito de responsabilidades, parece que le gusta practicar “el triple salto mortal sin red”
Debe por ello prestarse atención de antemano en los precisos momentos requeridos en los procesos de limpieza y sellado iniciados en varios Municipios, según el Diario de Burgos: desde Arlanzón, hasta una decena de ellos, más unas 100 escombreras.
Caso contrario, continuaremos infringiendo la Directiva 2008/98, abonando sanciones qué como Estado más sancionado en materias medio ambientales, venimos afrontando durante los últimos años, aunque dispongamos de ayudas y las penalizaciones se compartan a través de un tripartito supuestamente responsable que no funciona.
Y ello, aún manteniéndose en sigilo por la Comisión la ubicación de 1513 Vertederos Ilegales en España, y sus posibles irregularidades podrían afectar a la salud humana, y no son precisamente las circunstancias más idóneas para “hacer sangre”.
Este Medio adelantó su existencia el pasado mes de febrero, y que probablemente algunos se encuentren en Castilla y León.
¿Seremos conscientes el algún momento de la importancia que supone un Medioambiente con las debidas atenciones preventivas y reales medianamente asumibles, hacia un riesgo cero?
No hay qué desplazarse muy lejos de Burgos para contemplar ejemplos.
Jesús Antonio Rodríguez Morilla
Doctor en Derecho
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http://eldiadezamora.es/art/27950/demasiado-protagonismo-en-los-vertederos-de-burgos