Jesús Antonio Rodríguez Morilla
No podría decirse que las normas del derecho de acogida resulten imprevisibles, pero sí el número incesante de inmigrantes irregulares que arriban a Europa, y por ende a Italia y España, siempre huyendo de la miseria.
¿Cuándo se da una migración irregular?
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) define a las migraciones irregulares como un movimiento de “personas que se desplazan al margen de las normas de los países de origen, de tránsito o de acogida.
Una segunda versión se refiere a cuando la migración irregular surge cuando una persona ingresa, o vive en un país del cual no es ciudadano o ciudadana, violando sus leyes y regulaciones de inmigración.
Es un hecho que estas circunstancias sortean y desbordan en muchas ocasiones a los organismos encargados de su control, volviéndolos ineficaces, por lo que quizás convenga repasar cómo viene discurriendo este Tema, pretendiendo el presente artículo aproximarse y preguntarse, si continuará Italia realizando funciones de inicial “papel secante” con los flujos migratorios cada vez mayores.
Según Canariasdiario.com al 17.10.2023, se habían registrado en toda España, un incremento del 46,3% en la llegada de migrantes irregulares, con un total de 36.814 personas. Las entradas por vía marítima aumentaron un 54,7%, mientras que las llegadas por vía terrestre disminuyeron significativamente en Ceuta y Melilla
El número de los mismos llegados a Canarias en patera o cayuco en lo que va de año ha aumentado un 79,4% respecto al mismo periodo del año anterior, con un total de 23.537 personas interceptadas, lo que supone 10.415 más que hace un año, a todas luces asfixiante dada la morfología de las Islas.
Ambas se preparan para batir récord de llegadas.
En situación irregular durante 2023, según datos del Ministerio del Interior consultados por Europa Press, llegaron a España 21.780 personas, es decir, un 14,6% (2.773 más).
Si comparamos dicha cifra anterior en fechas recientes con los arribados a las Islas Canarias de 23.537 personas, observaremos una gran desproporción de orden territorial en disfavor de la segunda, a todas luces insuficiente e inadecuada, razón por la cual Gobiernos Central y Autonómicos de la Península pongan en práctica medidas de absorción.
Quizás convenga repasar regularmente cómo transcurre este Tema.
Volviendo un poco la vista atrás, y, según el mismo Medio, a España accedieron irregularmente hasta diciembre de 2022 un total de 31.219 migrantes, y a Canarias, 15.500, igualmente desproporcionados en función de territorio y cifras, según datos del Ministerio del Interior, o sea “in crescendo”.
En otro orden de magnitudes hasta mediados de septiembre 2023, habían desembarcado en Italia un total de 123.863 inmigrantes, según los datos del Ministerio del Interior, suponiendo el triple que los que llegaron en 2021.
Lampedusa con una superficie de apenas 20 km2 y con 6.000 habitantes ha registrado su récord diario de desembarco de inmigrantes con un total de 5.112, decretándose el estado de emergencia migratoria.
También cabe preguntarse si se convertirá EL HIERRO, con una superficie de unos 270 kms2, superior trece veces a la de Lampedusa y con 12.000 habitantes (el doble) que Lampedusa, u otra Isla integrante del Archipiélago para derivar inmigrantes.
Un esfuerzo notable se viene realizando en El Hierro, lugar al que han llegado este año más de 8.600 inmigrantes, según los recuentos facilitados cada jornada por los diferentes servicios de emergencia.
De otro lado, escasea la información que proporciona el Gobierno sobre la reubicación de estos miles de personas.
Tampoco se entiende mucho en que quedaron las “triunfantes” negociaciones del Gobierno con los países o puntos claves de las rutas de la migración.
Finalmente, según Frontex, en 2022, Europa registró un claro repunte de la inmigración irregular con 3330.000 entradas ilegales, la cifra más alta desde 2016.
Reflexión: ¿quién detiene el hambre o en cuanto se auto valora una vida en origen?
Jesús Antonio Rodríguez Morilla
Doctor en Derecho
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